Las Naciones Unidas (ONU) condenaron el martes 28 de enero las protestas violentas en la República Democrática del Congo (RDC) que se dirigieron contra oficinas de la ONU, embajadas y otros lugares en la capital Kinshasa.
El portavoz de la ONU, Stéphane Dujarric, declaró que los manifestantes prendieron fuego a áreas fuera de las oficinas de la ONU, incluidas las relacionadas con las operaciones de mantenimiento de la paz y otras agencias de la ONU, y atacaron varias embajadas. También se reportaron saqueos en Kinshasa.
Dujarric reveló que el Secretario General de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, había tenido conversaciones telefónicas separadas con el presidente de la RDC, Félix Tshisekedi, y el presidente ruandés, Paul Kagame.
“Discutieron la situación en curso en la parte oriental de la RDC en su conversación con el presidente Kagame, también hubo un énfasis particular en la protección de los civiles en la región”, dijo Dujarric.
Cuando se le preguntó sobre el resultado de las conversaciones, Dujarric declaró que la resolución de la crisis requeriría tiempo y compromiso con una solución política.
“La crisis en el este de la RDC lleva décadas. Esto no es algo que se pueda resolver en 24 horas”, agregó.
Citando el Proceso de Luanda como un marco prometedor, dijo: “Hay varios procesos que hemos visto, particularmente el Proceso de Luanda que ha mostrado progreso. Queremos ver que las partes se comprometan nuevamente con ese proceso”.
Establecido en 2022, el Proceso de Luanda tiene como objetivo aliviar las tensiones y encontrar una paz duradera entre la RDC y Ruanda.
Haciendo hincapié en que la ONU está coordinando con las partes interesadas para gestionar la situación, agregó: “También estamos en contacto con las autoridades francesas, que también han estado en contacto con varias partes relevantes”.
“Cualquiera que pueda ayudar, damos la bienvenida a cualquier asistencia inmediata”, dijo cuando se le preguntó sobre las expectativas de la ONU de Francia en la situación.
“Aunque, como dije, existe un proceso político muy bien establecido, el Proceso de Luanda. Queremos que las partes se comprometan nuevamente con ese proceso, y los esfuerzos de los países de la región y más allá deberían impulsar en esa dirección”, agregó.
Anteriormente, el lunes, el grupo rebelde M23, supuestamente respaldado por Ruanda, afirmó haber capturado la ciudad oriental de Goma, mientras que el gobierno de Kinshasa afirmó la presencia de tropas ruandesas.
Hasta ahora, al menos 25 personas han muerto en Goma y nueve más en Ruanda. Cientos han resultado heridos en los enfrentamientos en curso.
Los lugareños dijeron que tanto las fuerzas gubernamentales como los rebeldes controlan partes de la ciudad de 3 millones de habitantes, incluidos los refugiados de la zona.