El Gran Colisionador de Hadrones del CERN se prepara para importantes mejoras para 2030

En un emocionante desarrollo para el mundo de la física de partículas, el CERN ha anunciado una extensión de la tercera fase de funcionamiento del Gran Colisionador de Hadrones (LHC) hasta julio de 2026. Esta extensión permitirá a los científicos recopilar más datos y refinar sus experimentos antes de que el LHC se someta a importantes actualizaciones destinadas a mejorar sus capacidades.

El próximo Parón Largo 3 (LS3), ahora programado para comenzar a principios de 2027, preparará al LHC para su próxima fase, el LHC de Alta Luminosidad (HL-LHC), que se espera que comience a operar en junio de 2030. El HL-LHC permitirá colisiones de partículas más frecuentes, aumentando significativamente la cantidad de datos disponibles para análisis y potencialmente llevando a descubrimientos revolucionarios en la física fundamental.

Durante el LS3, se implementarán actualizaciones cruciales, incluida la instalación de imanes de enfoque avanzados y cavidades superconductoras innovadoras, que mejorarán la luminosidad del colisionador. Esta revisión es vital para mejorar el rendimiento de los experimentos ATLAS y CMS, que verán un reemplazo integral de sus sistemas electrónicos y detectores. Estas mejoras son esenciales para capturar las partículas y fenómenos elusivos que se encuentran en la vanguardia de la física moderna.

Las implicaciones de estos avances son profundas. Al aumentar la tasa de colisión, los científicos esperan descubrir nuevas partículas, explorar la naturaleza de la materia oscura y obtener una comprensión más profunda de las fuerzas fundamentales del universo. Como han señalado los portavoces del CERN, “Este es un momento crucial para la física de partículas, con el potencial de redefinir nuestra comprensión del universo.”

Además, las actualizaciones también beneficiarán a otras instalaciones en el CERN, incluida la instalación de física nuclear ISOLDE y el programa de aceleración de campo de plasma AWAKE, lo que indica un impacto más amplio en varios campos de investigación.

A medida que la comunidad científica global espera con ansias el inicio de las operaciones del HL-LHC, la emoción que rodea estos avances subraya la importancia de seguir invirtiendo en la investigación fundamental, allanando el camino para la próxima generación de avances científicos.

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