La investigación sobre la trágica muerte de Rhianan Rudd, de 16 años, ha revelado detalles preocupantes sobre su monitoreo por parte del MI5 mientras era manipulada por extremistas de extrema derecha. Rudd, que tenía autismo, fue encontrada muerta en un hogar de niños en mayo de 2022, aproximadamente 18 meses después de ser acusada de delitos de terrorismo por descargar un manual de fabricación de bombas.
Durante una revisión previa a la investigación en el Tribunal de Coroners de Chesterfield, se reveló que el MI5 proporcionó inteligencia a la policía durante su investigación sobre Rudd. Sin embargo, la agencia ha negado cualquier responsabilidad por proporcionar cuidados o apoyo, manteniendo que tales deberes están fuera de sus funciones estatutarias.
Rudd había sido referida al programa gubernamental de prevención de la radicalización, Prevent, por su madre tras mostrar un comportamiento preocupante. A pesar de haber sido acusada de delitos graves, los cargos fueron retirados cuando se reveló que había sido manipulada por extremistas estadounidenses, incluidos Christopher Cook y Dax Mallaburn.
La madre de Rudd, Emily Carter, expresó su creencia de que su hija debería haber sido vista como una víctima en lugar de como una terrorista. La investigación examinará el papel del estado en sus trágicas circunstancias, incluida la adecuación de las respuestas del MI5 y la policía con respecto a su salud mental y vulnerabilidad.
A medida que avanza la investigación, se espera que se revisen más de 600 archivos y 17,000 páginas de documentación relacionada con el caso. La investigación completa está programada para comenzar en febrero de 2025, con implicaciones significativas sobre cómo las agencias estatales interactúan con individuos vulnerables.