Un estudio reciente realizado por investigadores de Rutgers Health revela un preocupante aumento de los trastornos por uso de sedantes, hipnóticos y ansiolíticos entre adolescentes y adultos jóvenes en los Estados Unidos. El estudio, que abarca de 2001 a 2019, encontró un aumento triple de estos diagnósticos entre los adolescentes y un aumento quíntuple entre los adultos jóvenes. Esta tendencia alarmante destaca la necesidad de un enfoque multifacético para abordar el problema.
El estudio señala varios factores que contribuyen a este aumento, incluido el mayor acceso a estos medicamentos, tanto a través de recetas como por medios no médicos. El estudio también sugiere que una mayor conciencia y mejores prácticas de diagnóstico pueden estar jugando un papel.
El estudio también encontró una alta tasa de comorbilidad, con muchas personas diagnosticadas con trastornos por uso de sedantes que también tienen otros trastornos por uso de sustancias, particularmente el trastorno por uso de cannabis entre los adolescentes y el trastorno por uso de opioides entre los adultos jóvenes. Esto subraya la necesidad de estrategias de tratamiento integradas que aborden tanto el trastorno principal como cualquier problema concomitante.
Los hallazgos exigen un esfuerzo colectivo para abordar el problema, incluidas las prácticas de prescripción cautelosas, la educación sobre los riesgos del uso no médico y el acceso a los servicios de apoyo. Es crucial abordar el estigma que rodea a estos trastornos y promover el uso responsable de estos medicamentos.