Donald Trump tiene previsto asistir al Super Bowl LIX en Nueva Orleans el 11 de febrero de 2024, marcando la primera vez que un presidente en ejercicio asistirá al partido. El mariscal de campo de los Kansas City Chiefs, Patrick Mahomes, y el ala cerrada Travis Kelce, expresaron su honor por la asistencia del presidente, destacando el prestigio único que esto añade al evento.
Mahomes dijo a los periodistas: «Siempre es genial poder jugar frente a un presidente en ejercicio», reconociendo el honor de actuar ante el líder de la nación. Kelce se hizo eco de este sentimiento, declarando que sería un «honor» si el presidente asistiera al partido, añadiendo emoción al evento.
Trump, en una publicación en Truth Social, felicitó a ambos equipos y les deseó suerte en lo que describió como el escenario deportivo más grande. Añadió: «Haré la entrevista, antes del partido, a las 3:00 p. m. No ha habido ninguna en cuatro años (vaya, me pregunto por qué).»
Se espera que la presencia del presidente tenga un impacto en la seguridad de Nueva Orleans, con el portavoz del Servicio Secreto, Anthony Guglielmi, declarando que las medidas de seguridad se han reforzado este año. También se espera que la presencia de Trump sea un motivador significativo para los Chiefs, que aspiran a convertirse en el primer equipo de la NFL en ganar tres Super Bowls consecutivos.