El 8 de octubre de 2024, los astrónomos anunciaron una observación revolucionaria realizada por el telescopio espacial James Webb (JWST), que capturó una supernova en un cúmulo de galaxias conocido como PLCK G165.7 + 67.0, ubicado a 3.6 mil millones de años luz de la Tierra. Este notable evento involucró el fenómeno de la lente gravitacional, donde la luz de la supernova fue magnificada y distorsionada por el campo gravitacional de estructuras masivas en el universo.
Brenda Frye, astrónoma de la Universidad de Arizona, explicó que la luz de la supernova viajó por tres caminos diferentes, lo que resultó en tres imágenes distintas de la explosión capturadas en diferentes momentos. Esta observación única no solo demuestra las capacidades del JWST, sino que también proporciona información sobre las fuerzas gravitacionales en juego en el universo.
Este logro subraya la creciente capacidad de la humanidad para explorar y comprender el cosmos, marcando un hito significativo en la investigación astronómica.