El general Ben Hodges, excomandante del ejército estadounidense, cree que las sanciones occidentales podrían llevar finalmente a la caída del presidente ruso Vladimir Putin. Sugiere que el descontento entre los oligarcas rusos, que se ven directamente afectados por estas sanciones, podría hacer que se vuelvan contra Putin si continúa la guerra en Ucrania.
Desde el inicio de la invasión de Ucrania por parte de Rusia, Occidente ha impuesto estrictas sanciones a numerosos oligarcas rusos, restringiendo su capacidad para viajar y congelando sus activos. Esto ha afectado gravemente sus negocios internacionales y su estabilidad financiera.
Hodges argumenta que a medida que estos oligarcas se frustran por las limitaciones impuestas a su riqueza y estilos de vida, podrían decidir retirar su lealtad a Putin. Enfatiza la necesidad de mantener la presión sobre Rusia y sus oligarcas a través de medios diplomáticos, económicos, políticos y militares.
Además, Hodges señala que la población rusa podría desempeñar un papel crucial en la posible destitución de Putin. Si bien Putin obtuvo una mayoría significativa en las recientes elecciones, una disminución de la confianza pública podría llevar a cambios rápidos.
Hodges concluye que la única forma viable de poner fin a la guerra en Ucrania en términos aceptables para Occidente y Kyiv es esperar un cambio de liderazgo en Rusia, ya sea a través de renuncia voluntaria, muerte o destitución.