El 12 de octubre, el Ministerio de Medio Ambiente de Camboya firmó un acuerdo de cooperación con el Centro Internacional de Manglares (IMC) en Shenzhen, China, con el objetivo de restaurar los bosques de manglares del país, que cubren más de 58,000 hectáreas. El acuerdo se centra en fortalecer la colaboración, compartir experiencias y aumentar la conciencia pública sobre la importancia de los ecosistemas de manglares.
Durante la ceremonia de firma, los funcionarios enfatizaron los servicios ecosistémicos críticos que brindan los manglares, incluida la protección costera y el almacenamiento de carbono, que son vitales para mitigar el cambio climático. El ministerio también está distribuyendo plántulas gratuitas para promover la reforestación en las comunidades costeras.
En Europa, la UE enfrenta presiones internas que amenazan sus políticas ambientales, a pesar de su liderazgo histórico en conservación. Las recientes discusiones en la cumbre internacional Cop16 en Colombia revelaron un declive en el entusiasmo por las iniciativas ecológicas. La nueva Ley de Restauración de la Naturaleza de la UE, aunque es un paso adelante, ha sido criticada por no abordar adecuadamente los daños ambientales acumulados.
A pesar de estos desafíos, la ley tiene como objetivo restaurar ecosistemas dañados y aumentar la biodiversidad en Europa, con objetivos vinculantes para los estados miembros para rehabilitar sus hábitats naturales. Los activistas ven esto como un momento crítico en la lucha por restaurar bosques en peligro y proteger especies vitales.