Hallazgo de una antigua rama del Nilo revela secretos de la construcción de las pirámides egipcias

Madrid – Un descubrimiento trascendental ha arrojado nueva luz sobre la construcción de las pirámides egipcias. Investigadores han identificado una rama perdida del río Nilo, crucial para el transporte de materiales a los sitios de las pirámides. El estudio, publicado en la revista "Communication Earth and Environment", fue dirigido por la Dra. Eman Ghoneim de la Universidad de Carolina del Norte en Wilmington. El equipo de investigación utilizó imágenes de satélite, datos de radar y análisis de sedimentos para mapear el curso de la vía fluvial ahora desaparecida, apodada la rama Ahramat (en árabe, "pirámides"). La rama Ahramat corría a lo largo de la base de 31 de las pirámides egipcias más importantes, extendiéndose por 64 kilómetros. Este hallazgo confirma la sospecha de larga data de que el Nilo jugó un papel vital en la construcción de estas estructuras monumentales. La rama, de aproximadamente medio kilómetro de ancho y 25 metros de profundidad, proporcionó una ruta conveniente para transportar los enormes bloques de piedra utilizados en la construcción de las pirámides. A lo largo de sus orillas, los egipcios construyeron plataformas elevadas y caminos para descargar los materiales. Este descubrimiento evoca la planificación y el esfuerzo comunitario que se observa en la construcción de grandes obras en España, como la Sagrada Familia en Barcelona, y destaca la importancia de la cooperación y la ingeniería en la antigüedad. La investigación también reveló que el curso del río y los niveles de agua cambiaron con el tiempo, influyendo en los lugares elegidos para las pirámides. El equipo también descubrió evidencia de calzadas que conducían a la rama Ahramat, lo que respalda aún más su uso para transportar materiales de construcción. Este descubrimiento no solo mejora nuestra comprensión de la logística detrás de la construcción de las pirámides, sino que también resalta el ingenio de los antiguos egipcios para adaptarse a su entorno. En un momento en que la preservación del patrimonio cultural es crucial, este hallazgo nos recuerda la importancia de proteger y estudiar nuestro pasado.