El Banco Central de la República de Turquía (CBRT) ha elevado su previsión de inflación de fin de año para 2025 al 24%, citando factores que están fuera del control de la política monetaria. Sin embargo, el banco mantuvo su previsión de inflación para 2026 en el 12% y reiteró su compromiso con una postura de política monetaria restrictiva.
La revisión al alza para 2025 se atribuyó a un mayor peso de los servicios en la cesta del Índice de Precios al Consumidor (IPC), una actualización de la inflación alimentaria y un aumento del copago de los pacientes por los exámenes médicos. A pesar del ajuste, el gobernador del CBRT, Fatih Karahan, enfatizó que la revisión no señalaba un aflojamiento de la postura de política monetaria del banco.
Karahan destacó la importancia de la coordinación de políticas entre las políticas monetaria y fiscal para contribuir al proceso de desinflación. El CBRT tiene como objetivo lograr una disminución sostenida de la inflación y garantizar la estabilidad de los precios a largo plazo.
La tasa de inflación anual de Turquía cayó a un mínimo de 19 meses del 42,12% en enero, marcando el comienzo de un proceso de desinflación. El banco central espera que la inflación disminuya al 8% para 2027, con un objetivo a largo plazo de estabilizar la inflación en el 5%.