Altos funcionarios del Banco de Inglaterra (BoE) expresaron preocupaciones significativas el martes sobre los posibles impactos de los aumentos de impuestos del nuevo presupuesto del gobierno británico en la inflación y las políticas de tasas de interés.
El gobernador Andrew Bailey destacó que el presupuesto, que aumentó los impuestos a los empleadores, podría incrementar los costos laborales y complicar la capacidad de la BoE para predecir los movimientos de precios al consumidor. Reiteró que la BoE aún no podía determinar si las empresas responderían despidiendo empleados, aumentando precios o absorbiendo costos.
A principios de este mes, la BoE redujo su tasa de interés de referencia del 5% al 4,75%, pero al mismo tiempo aumentó sus pronósticos de inflación, en gran parte debido a las implicaciones del presupuesto. Bailey enfatizó un enfoque cauteloso hacia los ajustes de política monetaria, señalando que observar los efectos del presupuesto sería crítico.
La vicegobernadora Clare Lombardelli expresó preocupación por los riesgos al alza para la inflación, mientras que otros miembros del comité discutieron la posibilidad de que las empresas aprovecharan los aumentos de impuestos para justificar incrementos de precios. Las expectativas actuales del mercado son de dos a tres recortes de tasas por parte de la BoE para finales de 2025, en comparación con las cuatro recortes anticipados anteriormente.