El American Institute of Architects (AIA) ha condenado una orden ejecutiva firmada por el presidente Donald Trump que tiene como objetivo promover la arquitectura clásica en los edificios federales, argumentando que sofocaría la innovación y perjudicaría a las comunidades locales.
El AIA emitió un comunicado de prensa criticando la orden, que exige que los edificios federales „respeten el patrimonio arquitectónico regional, tradicional y clásico“. La organización expresó su preocupación por la posibilidad de que la orden retire el control de las comunidades locales, imponga preferencias de diseño federales y obstaculice la libertad de diseño.
El AIA cree que cualquier medida federal para limitar las opciones de diseño sería perjudicial para la arquitectura regional y la innovación. Argumentan que el actual Programa de Excelencia en Diseño de la Administración de Servicios Generales (GSA), que guía la construcción federal, no debe revisarse.
Los conservacionistas también han expresado dudas sobre la eficacia de la orden, señalando que la disposición Moynihan, que guía la GSA, ya exige una diversidad de tipos de edificios en todo el espectro del gobierno federal.
La orden ha sido criticada tanto por el AIA como por los conservacionistas, quienes argumentan que sofocaría la innovación y perjudicaría a las comunidades locales. El AIA cree que el actual Programa de Excelencia en Diseño de la GSA, que guía la construcción federal, no debe revisarse.